El mundo de las ONGD

Artículo sobre el mundo de las ONG y ONGD de una trabajadora con experiencia en el sector, ya que trabajo en una ONGD y he realizado voluntariado en ONGD durante varios años.


Primero quiero aclarar el tema de las siglas, si bien ONG significa Organización No Gubernamental, ONGD significa Organización No Gubernamental de Desarrollo. Para las personas que no están familiarizadas con el ámbito de la Cooperación es fácil mezclar las siglas. La diferencia está en que las primeras ONGs, suelen ser de carácter asistencialista, principalmente para paliar situaciones de emergencia. Las segundas ONGD, son las que realizan una tarea de Cooperación al Desarrollo que implica una interactuación entre los países del Norte y del Sur, tomando en cuenta como viven, se organizan y trabajan las personas y organizaciones de países del sur. Además de realizar actividades de Sensibilización y Educación para el Desarrollo dirigidas a la ciudadanía aquí en el Norte.

El Órgano que representa a las ONGD es la Coordinadora de ONGD, a nivel estatal y a nivel de comunidades autónomas, aquí en Euskadi es la Coordinadora de ONGD de Euskadi con Delegaciones en las tres provincias.

Todo esto, sin duda parece muy bonito ya que se trata de Organizaciones que trabajan en Defensa de los Derechos Humanos. ¿Pero qué pasa con las personas trabajadoras de las ONGD?, se pierde el norte respecto a los derechos laborales. Se trabaja muchas veces con contrato a media jornada pero metiendo bastantes horas más, confundiéndose el límite entre jornada laboral, militancia y voluntariado, esto pasa también con las jornadas completas. Las horas extras no son remuneradas porque se ofrece flexibilidad horaria, es decir, intentas recuperar horas acumuladas pero no las recuperas realmente ya que muchos días tienes que meter más horas para sacar el kurro adelante. Esto es, ”el buen rollismo” en las ONGD.

En lo estrictamente laboral en las ONGD se funciona con el Estatuto de Trabajadores-as y el Convenio de Despachos y Oficinas ya que no existe un Convenio Específico de Cooperación al Desarrollo. Si bien hay que reconocer que según las distintas comunidades autónomas los Convenios reguladores son diferentes, en Euskadi la mayoría de las ONGD tenemos el Convenio de Bizkaia que sin duda es mejor que el de Madrid.

Me gustaría poner como ejemplo a la ONGD Mugarik Gabe, esta ONGD disfruta de un Convenio propio, en el que funcionan de forma asamblearia y todas las personas trabajadoras de Mugarik Gabe cobran el mismo sueldo independientemente del puesto laboral que ocupen. Se considera un modelo y ejemplo a seguir. Realizo esta apreciación ya que muchas ONGD a lo largo de los años han pasado a ser Fundaciones, lo cual supone una estructura piramidal-vertical con lo que conlleva: Patronato, Consejo Directivo y por debajo las distintas áreas o departamentos en las que se clasifican a los y las trabajadoras.

No podemos olvidar que el Sector de las ONGD está feminizado, tanto por parte de trabajadoras como voluntarias, suponiendo el 80%. Este porcentaje tan elevado no se corresponde con los puestos ocupados, ya que los presidentes, patronos y directivos de las ONGDs son puestos ocupados por hombres, esto provoca una clara desigualdad de género. Lo cual es contradictorio ya que en las ONGDs una línea estratégica de trabajo es la Equidad de Género en Proyectos de desarrollo.

Si bien, es cierto que todavía nos queda un largo camino por conseguir mejorar las condiciones laborales de las personas que trabajamos en las ONGD. En las ONGD trabajamos personas sindicalistas e intentamos con nuestra lucha diaria cambiar las condiciones para mejorarlas. Es una lucha complicada pero no por ello vamos a dejar de intentarlo.

A LA LUCHA POR UN CONVENIO JUSTO!!!!