PRESENTACIÓN DEL LIBRO “EL NARCO OASIS VASCO” LIBURUAREN AURKEZPENA

Ahoztar Zelaieta Zamakona nació en Bilbao 1972. Es periodista y criminólogo, y nos acompañará el próximo martes, día 4 de febrero, en el local de CNT Vitoria Gasteiz, donde presentará, a las 19.30 horas, su última publicación editada por Txalaparta: EL NARCO-OASIS VASCO. CAPOS DEL NARCOTRÁFICO Y MAFIAS POLICIALES CON IMPUNIDAD POLÍTICA.

A esta obra le preceden otros títulos: Jóvenes Burukides Bizkainos (JoBuBis) Clientelismo y «fontanería» en el PNV (Txalaparta, 2013); La casta vasca: mafias y Gobierno Vasco en la última década, de Lakua a los JJOO de Brasil (Hincapié y Gure Liburuak, 2014); Kutxabank. El saqueo de Euskal Herria (Hincapié, 2016); Evasores, morosos y millonarios vascos. Panamá Connections (Hincapié, 2016); Euzkadi S.A. El gen corrupto del PNV (Hincapié, 2017); y, La trama del 4%. Las comisiones del caso de Miguel (Hilargi, 2018).

Y sumergiéndonos en ellos encontramos un montón de nombres propios: un cierto “quién es quién” que resulta de mucha y ardua investigación y que nos permite asomarnos al gran precipicio de la corrupción y de las agendas poco transparentes.

“(…) nieto de un gudari baserritarra e hijo de un ex cura euskaltzale (…) cursó sus estudios primarios y secundarios en la Ikastola Lauro en Loiu. Allí se codeó con algunos de esos cuyos apellidos nos suenan porque ocupan cargos públicos, salen a menudo en los medios de comunicación y forman “parte de las estructuras políticas de alto nivel de distintos partidos vascos”. “(…) Abandonó, en 1995, sus estudios de Periodismo para ocupar una plaza desierta en el equipo de investigación de Egin” y también colaboraba con la emisora Tas Tas Irratia. Tras la clausura judicial del diario Egin se dedicó a la revista de investigación y denuncia social Ardi Beltza, que también fue clausurada por decisión judicial. Pasó después por el equipo de Kalegorria y se tomó “un respiro” retirándose temporalmente del periodismo para cursar estudios de Criminología Juvenil.

Cuenta en nota a pie de página en una de sus obras que “desde que colgué la chapa de periodista en ejercicio, en 2003, he pasado por un proceso de descualificación laboral en distintos oficios por debajo del mileurismo que comprenden sectores tan dispares como la bisutería, la alimentación, hasta peón industrial en sectores relacionados con la carga y descarga. Varias empresas han decidido despedirme reconociendo la improcedencia de su decisión. En dos ocasiones he recurrido a ETTs y al amiguismo para poder salvar el mes”.

Quizás sean esas experiencias, las de la precariedad, tan conocidas por la mayoría de las ciudadanas y ciudadanos, las que le llevan a la más motivada denuncia de favoritismos, clientelismos varios, blanqueos de dinero, abuso de autoridad, prevaricación y evasión fiscal.

Defensor de la teoría criminológica del “iceberg de la delincuencia” que defiende que el delito conocido representa una parte ínfima de la criminalidad existente deja claros en sus páginas datos abrumadores en relación a la cantidad de millones de euros que las arcas públicas dejan de recaudar en beneficio de los y las más poderosas y en detrimento de la mayoría de la ciudadanía. Encabeza una de sus obras una cita de Balzac, que le tomamos en préstamo: “Detrás de cada gran fortuna se esconde un crimen”.

Apostando por un periodismo comprometido y valiente, el autor repasa los nombres propios y apellidos relacionados con la corrupción política y económica local estableciendo conexiones de largo alcance. Como no podía ser de otro modo, el neoliberalismo y la globalización liberan de fronteras a quienes más poder ostentan y a quienes más impunemente las transgreden.

Deja claro que no hay nada más ilusorio que hablar de ese cierto pedigrí vasco que activa imaginarios esencialistas en torno al honor, la honestidad, el buen hacer, y un montón de valores más. “Estos tiburones económicos, conseguidores y brókeres de lo público llevan cuatro décadas abriendo puerta giratoria para la corrupta casta del poder” aseguraba en 2016.

Y ahora llega con más información, tan crítica como dolorosa, en su última obra, cuya sinopsis tomamos de la editorial:

“A través de la historia de un bilbaíno asociado a la mafia italiana de Nueva York, este libro nos presenta la foto de familia de los capos vascos del narcotráfico, narco-agentes y confidentes policiales que gozan de anonimato mediático, rodeados de una aureola de impunidad política y judicial. Asimismo, comprobaremos cómo, desde hace varias décadas, las redes gallegas del narcotráfico cuentan con una infraestructura estable en Euskal Herria y las organizaciones mafiosas han sacado provecho de una cierta permisividad institucional, cuando no connivencia, para perpetuarse en el liderazgo de la delincuencia organizada que opera en el Estado español. Mientras el foco mediático señalaba a Galicia y Andalucía como origen del tráfico de droga en Europa, Euskal Herria, sin abrir telediarios, protagonizaba récords en alijos, convirtiéndose en un enclave internacional estratégico. Así, mientras las viejas redes vascas del narcotráfico no acaban de morir por sus conexiones con los aparatos del Estado, las nuevas organizaciones no terminan de nacer y se diversifican, copando otros negocios lucrativos como los clubes de alterne, que hacen de nuestro país un pequeño oasis. Partiendo de las investigaciones de Pepe Rei y los equipos de Egin, Ardi Beltza y Kalegorria, Ahoztar Zelaieta repasa hasta nuestros días los numerosos casos de políticos y agentes policiales investigados o condenados por su relación con el narcotráfico. Una historia de connivencia e impunidad. Bienvenidos al narco-oasis vasco.”

El texto es el resultado de mucha investigación y muchas conversaciones, que según declaraba el autor a la prensa, le han llevado por territorios insospechados y le han permitido analizar una red de colaboraciones institucionales necesarias sin las que no hubieran podido cometerse los delitos que estudia y el enriquecimiento de unos pocos con elevados costes de destrucción para el resto. Una de las conclusiones a las que llega el autor es que “la red de narcotráfico en el País Vasco es muy fuerte, muy fuerte” y este hecho ha sido ignorado.

Juguemos con las palabras: nos gustaría que en vez de sobre narcos se oyera más hablar de anarcos; y nos gustaría que de verdad fuera oasis, y no selva “del sálvese quien pueda” donde pervive el clientelismo más feudal, donde se desconoce la ética y triunfa el amiguismo sin escrúpulos, esa isla intachable y distinguida que parecía nuestro entorno más inmediato, y que no ha escapado a las tendencias circundantes. Que fueran oasis de dulces dátiles y oasis de surtidores de agua limpia y transparente…

Eso es lo que nos gustaría, anarcos y oasis de verdad… pero de momento, el martes a las siete y media de la tarde nos vemos en la C/ Correría, nº 65, en el local de CNT Vitoria Gasteiz para disfrutar de la presentación del último libro del periodista y criminólogo Ahoztar Zelaieta Zamakona: El narco-oasis vasco. Capos del narcotráfico y mafias policiales con impunidad política (Txalaparta, 2019).