OSAKIDETZA CERRÓ 300 CAMAS A LAS PUERTAS DEL PICO DE LA GRIPE – El Mundo

  • Los sindicatos de Basurto y Cruces denuncian la falta de previsión del Servicio de Salud

Hospital de Basurto, en Bilbao. EFE


BELÉN FERRERAS | Bilbao | @belenferreras | 

El Servicio Vasco de Salud, Osakidetza, cerró alrededor de 300 camas en los hospitales de referencia de Bizkaia, Basurto y Cruces, con motivo de las vacaciones navideñas y el descenso de personal que conllevan, pese a que se estaba a las puertas del mayor pico de la temporada de gripe. Tras la denuncia de colapso en las urgencias de ambos hospitales por parte de los sindicatos, coincidiendo con el recrudecimiento de la epidemia de gripe, las plazas cerradas (200 en el centro de Cruces y 100 en el de Bilbao) se han ido reponiendo de forma paulatina. Esto permitió que el consejero de Salud, Jon Darpón, asegurara categóricamente ayer que no existe ningún colapso en el servicio de urgencias.

Sí admitió el consejero que en estos momentos acude «mucha más gente» a los servicios de urgencia de los hospitales, pero negó que se esté «desbordando el sistema» como aseguran los sindicatos: «Hay más gente en las urgencias y más personas ingresada, seguro que tenemos problemas de sobrecarga en momentos puntuales, pero el sistema no está desbordado. No es nada inhabitual», indicó Darpón.

El consejero no reconoció, sin embargo, como denuncian todas las centrales representativas en la Sanidad vasca, que los problemas parten de una falta de planificación de cara a los periodos de vacaciones, del cierre de camas y de que no se sustituyen al personal que está de vacaciones para «ahorrar costes». Es más, se dirigió directamente a los sindicalistas para pedirles que «si pasan por una urgencia y la ven sobrepasada, lo lógico, como trabajadores sanitarios que son, es que se queden a echar una mano, en vez de ir corriendo a los medios de comunicación a denunciar», dijo.

Sin embargo, los sindicatos insisten en que la falta de planificación queda en evidencia cada periodo vacacional, más aún en este periodo de invierno cuando se espera la llegada los picos en la gripe que, además este año, se ha adelantado respecto al 2016, que no se produjo hasta la tercera semana de enero. «Luego al final hay que acabar abriendo las camas que previamente se han cerrado después de tener a los pacientes y a sus familiares de mala forma por los pasillos del servicio de urgencias», señalaba ayer la responsable del área de Salud de UGT, Ana Vázquez.

Los sindicatos denunciaron ya el pasado martes el bloqueo de los servicios de urgencia en ambos hospitales de Bizkaia, Basurto y Cruces, y de otros centros hospitalarios desbordados por falta de camas a las que derivar los pacientes, a lo que Osakidetza respondió acusándoles de querer «crear mala imagen» y de «generar desconfianza» respecto al Servicio Vasco de Salud. Pero lo cierto es que el cierre de camas es una práctica habitual para no tener que contratar personal durante las vacaciones.

A modo de ejemplo, en uno de los hospitales objeto de la polémica, el de Basurto, la planificación navideña supuso en alguno de sus pabellones reducir al mitad el número de camas desde el 17 de diciembre al 8 de enero y por ejemplo, pasar de 30 a 15 camas, de 11 a 3, de 15 a 5 o de 28 a 15 en algunas áreas.

Algo que provocó, en este y en otros hospitales, imágenes dantescas: «pacientes hacinados en camillas por pasillos y áreas anexas a urgencias, familiares pasando la noche en el suelo, personal sanitario sin refuerzos corriendo para atender a todos ellos, celadores desprovistos de camillas y sillas de ruedas yendo a buscarlas a puntos dispersos de los hospitales, administrativos atendiendo colas interminables, y la ya endémica carencia de facultativos», señalaban desde ELA.

El consejero reconocía ayer que al producirse uno de los picos de gripe durante el periodo vacacional «al sistema sanitario le cuesta más reaccionar». Sin embargo mandaba un mensaje tranquilizador a la población, tanto en lo que se refiere a la atención sanitaria en los centros hospitalarios como en la virulencia de la gripe este año, que ya ha causado un fallecido y 18 casos graves.

«La incidencia que está habiendo este año no es superior a la de los años anteriores, lo que ocurre es que, al haberse adelantado un poquito y haber entrado en fechas navideñas, siempre tiene más incidencia», aseguró el consejero, que recordó que en esta época es «más fácil contagiarse» por una mayor concentración de gente en bares, en las cenas, en las comidas, en los sitios cerrados». Insistió en que «la gripe afecta más a las personas mayores y a la gente con enfermedades crónicas». «No es distinto a lo que ha ocurrido otros años», subrayó.

EL MUNDO